
Estos días me he repetido a mí misma que soy una tonta "cómo narices vas a contar tu vida en Internet. ¿Te piensas que eso te va a ayudar en algo? ¡Estás loca, Carol! ¡Baja de la nube!" Y como sé que esas palabras autocríticas con este ciber pisito de soltera virtual, las dice mi baja autoestima después del suceso del sabado pasado con J, he decidido que no sólo no voy a abandonar el blog sino que voy a continuar con él. Porque ya está bien de ir llorando por las esquinas y la mejor terapia es llegar aquí, desahogarme e intentar ser un poquito feliz. I me apoya en mi decisión de seguir contando mi vida a través de esta ventana a la red y si mi mejor amiga me da su beneplácito, no hay más que hablar.
Esta tarde me toca ir a trabajar al cine y por eso esta mañana había pensado en traer algo divertido para que nos riamos y nos olvidemos de los malos rollos que, teniendo un ex como el que tengo yo, a veces son inevitables. Y se me ha ocurrido hablar de lo desmemoriados que somos a veces los seres humanos:
Yo soy de esas personas que tienen que apuntarse todo en post-its y pegarlos por toda la casa para acordarse de lo que tiene que hacer. Sobre todo con cosas del trabajo o con cosas de la casa. Pego en notas lo que tengo que comprar, el informe de la gestoría que tengo que entregar... ¡A veces incluso apunto si ha llamado alguien importante para recordar que tengo que devolver la llamada! Soy mala para la mayoría de las fechas y a veces les cambio los nombres a la gente. Soy lo que se llama una mujer desmemoriada de los pies a la cabeza. Mamma dice eso de sí: "mucha mujer sóla preparada para la vida moderna, pero eres un poco desastre cuando tratas de recordar algo". Es taaaaan cierto. A veces tienen tanta razón las madres....
Y ahora espero que vosotros me habléis de la buena memoria que tenéis, de lo mucho que mola acordarse de fechas importantes, llamadas y cosas del trabajo y de la casa sin tener que apuntarlos cien veces y entonces yo, en sentido figurado sólamente, me moriré de envidia.
Y ahora espero que vosotros me habléis de la buena memoria que tenéis, de lo mucho que mola acordarse de fechas importantes, llamadas y cosas del trabajo y de la casa sin tener que apuntarlos cien veces y entonces yo, en sentido figurado sólamente, me moriré de envidia.
Un saludo desde mi alcoba,
(gracias por los comentarios y seguidores)
Carolina.
(gracias por los comentarios y seguidores)
Carolina.